martes, 12 de junio de 2007

Locura ordinaria


Sanchificación de Quijano
Ay Sancho, si tu vieras
morirse la locura aquí en mi frente,
restaurarse la luz en mis sentidos,
retroceder las sombras
a su obnubilación para mis sesos.
Si tú pudieras, Sancho,
nacer así de vuelta a la tragedia
que la tristeza impone a lo imposible
que la desolación goza en nosotros,
que la realidad, vacua, nos otorga,
tal vez si me creerías
-me quisieras creer- cuando te digo
que logré ver gigantes donde solo hay molinos
José Manuel Diez

1 comentario:

Anónimo dijo...

ole y ole ese joselito bueno!
pezo de tio
muxos bs de una fan iconicional
eres buen agente!